Tacaños
18.06.2014

 

Números y Roña

Mucho antes de que mandaran el dinero y los mercados la tacañería ya estaba asentada entre nosotros.

No es éste asunto del bolsillo. Ser tacaño es enfermedad y pena del espíritu. Cobardía. Miedo a tomar riesgos. Inseguridad de quien no confía en la abundancia de la vida. La tacañería es un problema de autoestima. Un complejo disfrazado de vicio sucio y solitario.

Tacaño es quien no comparte lo que tiene, lo que siente o lo que sabe por si acaso se le agota. Hay tacaños con las palabras que ahorran en gracias y porfavores. Avaros del esfuerzo, de la responsabilidad y del compromiso. Cicateros del conocimiento que ocultan a sus compañeros lo que aprenden. Mezquinos emocionales que racanean en la amistad y en el amor. Ruines que no salen a la calle sin llevar una regla de dos caras. Una que mide en centímetros lo que recibe y otra cara, milimetrada, para calcular lo que está dispuesto a dar a cambio.

En tiempos de recortes y renuncias, en estos tiempos egoístas y mezquinos, los generosos brillan con luz propia. Los que aman sin reservas. Los que se entregan sin contrapartidas. Los que no anteponen condiciones. Los que afrontan la vida sin escudo. Los que agotan hasta el último suspiro. Los que no se guardan nada para más adelante.

Un día, por falta de uso, a los tacaños se les oxidó el mecanismo que les permitía dar, entregarse o compartir. Es una lástima. Desde entonces viajan por la vida con el alma manchada de roña.

No. No es casualidad que también los llamemos roñosos.

Publicado en El Diario vasco el Domingo 13 de mayo de 2012.

Foto.- Números y Roña. Puerto de Lipari, Islas Eolias, Sicilia. 2003.

4 comentarios:

  1. HELENA dice:

    Siempre he dicho que es que es tacaño lo es con todo no solo con el dinero, se es tacaño de espíritu pero lo has expresado de maravilla.
    Acabo de descubrir este blog aunque siempre te he leido en el DV.
    Muchas gracias por tus ideas.

  2. Nubio dice:

    Hola Guille,

    Me encanta la extensión que haces del concepto de tacañería. Muy interesante, a la vez que inevitablemente le anima a uno a reflexionar.

    Un saludo y muchas gracias por ofrecernos tus reflexiones.

Responder a Nubio:

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