Madres
07.05.2017

 

aldaba con anillo

El día que lo supiste, el día que lo sentiste y el día que oíste su llanto. Los días sin noche de varicela, otitis, tos, sarampión, dientes de leche, anginas, paperas, gripe y estirones. Las tardes de divisiones con decimales. El día de pegar hojas de árboles en una cartulina. Los sábados de columpios, cocinitas, bobesponjas y meriendas de cumpleaños. El día que aprendió a responder NO y se enfrentó a tu autoridad.

Los días de sentarse y hablar en serio sobre el acoso, la anorexia, el alcohol, el respeto a los demás, el uso del móvil o los anticonceptivos. Los días tediosos de enseñar a hacer deberes, recados, tareas de casa y otras obligaciones. El día que trajo unos amigos y no te gustaron. El primer beso. La primera ruptura. La primera noche esperando en vela hasta su vuelta. La primera calada. La primera vez de tantas cosas.

Los días de aprender a detectar las señales de crisis. Los días de desmontar dudas, vencer temores, olvidar disgustos. Los días de ser pesada. Estudia, abrígate, ten cuidado, ten cabeza. Los días de enseñar a vivir con complejos y frustraciones, aceptar los cambios físicos, definir la identidad, relacionarse con el mundo. Los días de premio, castigo, sonrisas y morros. Los días de disculparte porque te dejaste llevar por el genio, el egoísmo, la sobreprotección y no fuiste ejemplo.

Enfermera, sicóloga, cocinera, profesora particular, entrenadora, costurera, taxista. Ser madre es aceptar un compromiso a tiempo completo. Todos los días es el día de la madre. Y hoy también.

Felicidades.

 

 

 

Publicado en El Diario Vasco el Domingo, 7 de Mayo de 2017.

Foto.- Aldaba con anillo. 2012.

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